Alcobendas Rugby B Wiss ha conseguido la tercera victoria del año. Esta vez fue frente al Complutense Cisneros Theta por 42-31.

Alguien dijo una vez que la Historia no es sino una sucesión sucesiva de sucesos sucedidos sucesivamente. Y así comenzó la historia de este partido, sucesivos sucesos fueron mermando la nómina de jugadores previstos desde los diecinueve iniciales hasta los dieciséis que teníamos al comenzar el partido más uno que llegó algo después por cuestiones de trabajo.

Perder tres jugadores es malo, pero si enfrente vas a tener a un equipo con oficio, que está cuatro puestos por encima en la clasificación y con quince puntos más, convertía el partido en un reto difícil de superar. 

Tocaba guardar fuerzas para poder aguantar los ochenta minutos. Quizás por eso se salió un poco conservadores y ellos, que vieron mi soledad en el banquillo, se vinieron arriba y a los 10 minutos ya habían abierto brecha en el marcador con un golpe y un ensayo que ponían un temprano 0-8. 

Había que cambiar las cosas y empezamos a hacerlo, les llevamos atrás y Bernardo se encargó de enseñarnos que su defensa no era muy fuerte, cuando le llegó un balón centrado y se empeñó en posar pese a tener dos rivales intentando pararle. Ryder completaría la jugada y cerrábamos la brecha 7-8.

Tras quince minutos volvía a empezar el partido. Como el rival no quería sorpresas, se echó adelante y dominó el campo, forzando nuestros golpes. Con dos de ellos ampliaron la ventaja a 7-14; y poco después a 7-21 con un ensayo transformado. Parecía que era el despegue definitivo, pero no se lo íbamos a regalar y el ‘Profe’ en la última jugada de esta primera parte conseguía un nuevo ensayo, bajo palos para facilitar la patada de Ryder y meternos en el partido de nuevo. Descanso con 14-21

Pero el descanso también es parte del partido. Y en este partido fue un momento fundamental. La arenga en el vestuario hizo su efecto, ¡Podemos ganar! ¡podemos ganar! Ese mensaje se grabó en las cabezas de nuestros jugadores y se reflejaba en sus rostros. Y cuando la cabeza quiere…

De poco sirvió el ensayo recibido a poco de la reanudación, porque Arturo se encargó de equilibrarlo cinco minutos después. 21-28. En mi banda, escuchaba al staff rival diciendo que no podríamos aguantar el ritmo por falta de cambios. En la banda contraria, la afición nos sostenía. Como en otras ocasiones, varios compañeros del primer equipo estaban viendo el partido y se dieron cuenta que algo había cambiado. 

Reestructuramos las líneas con la entrada de Mati, ganando en velocidad. Y empezamos a jugar en su campo. El propio Mati, tras una gran carrera, iba a conseguir el ensayo que nos daba el bonus ofensivo y la patada de Ryder igualaba el marcador a 28. Quedaban veinte minutos para el final.

La lesión de Cobaya, nos dejó temporalmente con catorce en el campo, mientras Velasco terminaba de prepararse para un nuevo episodio de su Last Dance. Para cuando pudo entrar Ryder ya nos había puesto por delante con un nuevo ensayo que el mismo convertía. 35-28 y quince minutos por delante. 

Nuevos cambios en las filas rivales, les dieron algo de aire y su melé, que estuvo mejor que la nuestra, les iba acercando a nuestros palos. Tocaba demostrar que nosotros sí defendíamos, y no dejamos que volvieran a pasar. Por eso, cuando tuvieron un golpe a favor, decidieron convertirlo y ponerse a tiro de ensayo 35-31.

Pero en la jugada siguiente Ryder volvería a irse para conseguir su segundo ensayo, completar la jugada y su exhibición de patadas (hoy hizo pleno: 6 de 6) para cerrar el marcador en 42-31.

Enorme esfuerzo el realizado por estos diecisiete jugadores que decidieron creer en la victoria y por eso ganaron. Cisneros creía tener el partido ganado y por eso perdió.

Esta victoria nos sitúa en sexta posición en la tabla, a falta de un partido contra Veterinaria, que es octavo, la próxima semana. Según como se sucedan los sucesivos sucesos, podemos quedar en el grupo de ascenso (ocho primeros) o en el de permanencia. Pero lo que hemos vivido, sentido y disfrutado este mes de enero, con el Alcobendas Rugby B Wiss, no hay quién nos lo quite.

Y lo que nos queda…


José Ramón Quesada